Infraestructura en transporte: una deuda pendiente

Cronista

por ESteban Moscariello

En un reciente estudio de la BCR en su tradicional ‘Informativo Semanal’ establece que desde la salida de la convertilidad el sector agroindustrial contribuyó a la generación de divisas entre el período 2002-2014 en total por 273.076 millones de dólares como exportaciones reales acumuladas en el período en los rubros ‘granos, harinas y aceites vegetales’.

Ahora bien, más allá de estos ingresos la inversión en infraestructura no estuvo entre las prioridades por parte del Estado Nacional. Distintos analistas establecen que el stock de infraestructura pública es uno de los factores productivos más importantes y una de las variables fundamentales que contribuyen al crecimiento y desarrollo económico de un país.

Existe un verdadero déficit en la inversión pública en esta materia más allá de los aportes de divisas que genera el sector agroindustrial a la Argentina, a su vez este sector es el verdadero generador de divisas de nuestro país.

Un estudio de la CEPAL establece que el impulso significativo para la incorporación de capital privado en el sector de infraestructura lo constituyeron los procesos de privatización iniciados en los países de la región hacia finales de la década del ochenta. La inversión en infraestructura mostró una tendencia decreciente en nuestro país durante los últimos años.

Es cierto que tenemos que reconocer que la inversión por parte del Estado se viene haciendo pero es cierto también que esta inversión no es suficiente, además ese aporte del Estado no compensa la caída de la inversión privada en infraestructura.

Desde la BCR se viene insistiendo hace tiempo con obras de infraestructuras viales y portuarias prioritarias para la Región Centro, entre las más importantes podemos destacar las siguientes: Autovía Ruta Nacional N´ 19: Córdoba – Santa Fe. Resta ejecutar el tramo Ciudad de San Francisco (Córdoba)- Ciudad de Córdoba (Capital); Reconversión del Puerto de Santa Fe; Ruta Nacional Nº 11. Autovía Santa Fe-Reconquista; ‘Hidrovía Paraguay-Paraná’. Profundización del canal navegable troncal del Río Paraná desde el Puerto de Santa Fe al mar y dragado y balizamiento del tramo Corumbá – Santa Fe; Construcción de una Autovía en la Ruta Nacional Nº 33 (Tramo: Rufino – Ruta Nacional A 012). Construcción de una Autovía en la Ruta Nacional Nº 34 (Tramo: Rosario -Sunchales); Conversión en Autovía/Autopista la Ruta Nacional A 012; Reestructuración del ferrocarril Belgrano Cargas y Logística S.A. y realización de las obras de infraestructura fija y de equipamiento de transporte, entre otros.

Según expertos en la Argentina el 90% de la carga es transportada por camión y la BCR estimó que durante 2014 en las terminales portuarias ubicadas en la Región Metropolitana de Rosario (RMR) se embarcaron cerca de 56 MMT de granos, aceites, harinas y biodiesel. Se estima un crecimiento de los productos embarcados del 56% entre 2000/2002 contra 2011/2013. Diversos estudios estiman que el 30% del movimiento nacional de cargas de nuestro país se concentra en la zona del Gran Rosario. La concentración es principalmente con camiones y así se generan importantes congestiones y mayores costos en la operación de transporte. Desde la Bolsa estiman que a la zona de Up-River ingresan 1.600.000 camiones por año con 30 toneladas cada uno, equivaldría a 48 millones de toneladas de granos y así vemos que en el trienio 2010 a 2012 se habría elevado cerca de 172 millones de toneladas de granos, subproductos y aceites vegetales. Esto significa una mayor demanda de logística y muy aceitado.

Como ya mencionamos se realizaron inversiones en infraestructura pero estas no han sido suficientes, no han acompañado a la demanda. Analistas estiman que el uso del ferrocarril no es mucho más que el 6% del transporte interurbano total. Necesitamos darle impulso al uso del transporte ferroviario tan importante en un país con largas distancias. Para lograr este objetivo se necesita inversión y estas inversiones son factibles desde el exterior.