El clima cambia los precios en EE.UU., el dólar en Argentina
La volatilidad en el mercado externo es solo una parte del movimiento de los precios locales. Las herramientas de los mercados de futuros y opciones nos permiten obtener todavía mejores precios.
En el mercado de granos mientras que el clima sea el factor que mueve los precios, las demás variables dejan de ser importantes más allá de que tengan algunos cambios relevantes.
Las cotizaciones futuras en el mercado de Chicago no pueden definir una tendencia por las idas y venidas del clima con las condiciones efectivas que impactan en los cultivos o los pronósticos que se conocen y cambian diariamente.
Los datos más concretos que muestran el impacto del clima se materializan en el informe semanal del estado de los cultivos que, semana tras semana, muestran bajas en la categoría de bueno a excelente en el trigo de primavera, el maíz y la soja.
Además también se observa la expansión del área de sequía en el informe semanal del Monitor de Sequía que alcanza algunas zonas productoras del maíz y la soja.
Así, el clima es el factor que siguen los operadores en el mercado de Chicago donde los fondos especulativos redujeron su posición neta vendida o hasta se informan netas compradas en algunos casos.
Estos participantes son los que mueven los grandes flujos de dinero para impactar en los mercados de futuros donde los coberturistas son menos y actualmente se muestran más como agresivos compradores que vendedores.
El impacto de esta variable comienza a diluirse en el mercado del maíz donde en las próximas semanas comienza la cosecha en algunas zonas pero continuará siendo clave durante el mes de agosto para el mercado de la soja.
Para el comportamiento del mercado es también importante la lectura que realizaran los operadores al próximo informe mensual del USDA del próximo 10 de agosto.
Los datos más relevantes serán los relacionados a la cosecha 2017/18 partiendo del área que finalmente se podrá recolectar y el rinde promedio a obtener.
Hasta el momento las cifras publicadas se construyen a partir de las proyecciones de tendencias ajustadas por el desarrollo del clima en las zonas productoras pero faltan datos concretos que se esperan a partir de agosto.
Con las últimas proyecciones se espera que se ajusten a las bajas las proyecciones de cosecha de los principales productos agrícolas de EE.UU. que tienen una gran participación como destino de exportación.
Aquí surge la oportunidad de otros países exportadores para capturar parte del mercado que el país del norte podría dejar de abastecer aunque los datos globales de todos los productos agrícolas muestran un balance holgado por la campaña 2016/17 donde los stocks finales son récord.
En el mundo no faltan granos ya que la campaña mencionada nos encontró con producciones record de todos los granos con una demanda que creció a menor tasa, dejando así grandes existencias que limitaron las subas.
El ciclo 2017/18 comienza con datos de menor oferta que podrían tener un sostén en las cotizaciones futuras si se confirman las menores cosechas de importantes países exportadores y luego no se revierte la situación con Sudamérica.
Recordemos que tanto Brasil como Argentina tienen una importante participación en la producción de maíz y soja mundial, cuyos excedentes productivos se vuelcan al mercado exportador que compiten mayormente con Estados Unidos.
Para la campaña 2017/18 todavía es prematuro hablar de las siembras pero algunos analistas ya especulan con un incremento en el área de cobertura de ambos productos en ambos países.
En Brasil se espera un aumento del 2% de la siembra de soja pero con una cosecha menor luego de los rindes records obtenidos este ciclo que permitió cosechar 114 M de ton, mientras que en Argentina está firme la competencia entre el maíz y la soja.
La oleaginosa corre con una ventaja de caras al próximo ciclo: a partir del mes de enero se reducirá por mes 0,5% los derechos de exportación, acumulando un recorte del 6% en el 2018.
Esta variable representa una mejora del precio futuro, sin embargo no hay que olvidar que la base para su determinación es el precio en el mercado internacional que puede subir o bajar según el contexto de oferta y demanda. No está asegurado conseguir mejores precios de soja el próximo año ante la volatilidad externa.
Los cambios de los precios de los granos pueden ser al alza o a la baja, una confirmación de esta mención nos lo muestra el mercado actual donde el clima llevo a recuperar los precios futuros en algunas semanas atrás pero bajando la última semana en Chicago.
A los precios locales los salva el dólar
Mientras en el mercado externo la referencia de precios mostro bajas en la semana pasada, los precios locales subieron en respuesta a la devaluación del peso frente al dólar que genera la ilusión de obtener mejores precios por los productos.
Con la suba del dólar, los precios de todos los productos argentinos mostraron mejoras en relación a las últimas semanas que impulsaron la realización de negocios por parte de los productores.
La soja disponible regresando a los valores de $ 4400 que no se obtenían desde comienzos del año llevo a muchos vendedores a cerrar negocios o a fijar aquellos que no tenían precios. Este valor hoy representa unos usd 246 mientras que en enero dicho valor representaba usd 272.
Así se observa que el regreso de los valores de la oleaginosa a los niveles de comienzo del año es una ilusión que solo se confirma en su evaluación en pesos pero no en dólares.
Lo mismo sucede con los demás productos. Tenemos precios en pesos en el mercado del maíz que no pensábamos volver a encontrar en el momento de la cosecha de segunda y mejoras en el precio del trigo que no son tales ya que en dólares el cereal se mantiene relativamente estable.
Esto nos demuestra que estar esperando mejores precios por el dólar nos lleva a dejar de considerar que los precios en dólares pueden bajar.
Por dicho motivo cuando se analizan las oportunidades de negocios, el productor argentino desde hace ya varios años tiene que considerar las expectativas del dólar pero sin dejar de mirar la evolución de los precios futuros.
El mercado argentino tiene las herramientas que le permite combinar estrategias evaluando el comportamiento de los precios de los granos, del dólar y ahora se suma la posibilidad de contar con precios futuros de ganadería.
El conocimiento de las herramientas de futuros y opciones permite obtener oportunidades de hoy estar vendiendo muy por arriba los productos futuros obteniendo mayores retornos.
Lo que viene…
El clima continuara siendo el principal factor que mueve los precios en el mercado externo, pero en el mercado local el dólar se lleva la atención de los participantes del mercado.
Con la volatilidad en las cotizaciones hay que estar atento a las oportunidades de negocios que se pueden presentar pensando en el próximo ciclo productivo.
Entre otros factores de seguimiento en el mercado nos encontramos con:
– Condición de los cultivos en EE.UU.
– Posición de los fondos especuladores
– Demanda de exportación
– Cosecha de maíz en Brasil y Argentina
– Ventas de productores
– Tasa de interés y dólar en Argentina